Tuesday, January 31, 2006

Los tatuajes y la piel

Los cuidados de un tatuaje luego de su realización suelen ser muy relativos, dependiendo en parte, del artista que ha hecho la obra y en parte, de la respuesta que presenta cada organismo a un tratamiento dado.

Antes que nada: "siempre debemos tener en cuenta que, un tatuaje es una herida abierta en nuestro cuerpo" y como tal, puede caer presa de algún microorganismo del ambiente que nos provoque una infección y esta, por mínima que fuese, podría llegar a afectar el resultado final.

Es sabido dentro del mundo del tattoo que los cuerpos y sus sistemas inmunológicos varían de tal forma que, lo que puede ser un buen método de cicatrización para algunos clientes, puede crear trastornos en otros.

A pesar de esto se podría establecer una especie de compendio básico sobre los cuidados del tattoo, teniendo en cuenta aspectos tan primordiales como la higiene y la humectación del mismo.

HIGIENE:

En una primera instancia; y personalmente, creo que es la más importante a la hora de evitar infecciones, debemos procurar una buena higienización de la zona aunque de ninguna manera ésta se debe efectuar de forma excesiva.

Lo más recomendable es lavar el sitio con un jabón de PH neutro destinado específicamente para este fin. El mismo deberá ser guardado cuidadosamente en un lugar higiénico o envuelto en un plástico-film adherente para que se conserve lejos de microorganismos o agentes externos, que podrían afectar su inocuidad.
Es preferible frotar la pastilla de jabón con las manos limpias y en agua tibia, a efecto de que ésta se disuelva, y luego masajear la zona tatuada hasta remover todo el excedente de tinta y solventes que el cuerpo ha ido eliminando.
Una vez finalizado este paso debemos secar la herida, suavemente o a palmadas, con una servilleta descartable o con una toalla a la que no hayamos usado con anterioridad. Nunca hay que hacerlo de manera brusca o frotando.

Este proceso hay que repetirlo entre dos y cuatro veces por día ya que, menos le quitaría desinfección a la herida y, más, podría llegar a provocar que la costra-cascarita se ablande demasiado.

ACLARACIONES:

Es importante evitar el uso de otros tipos de jabones ya que, los perfumes que suelen tener la gran mayoría de éstos, pueden irritar la piel. Jamás debemos tocar al tatuaje sin lavarnos las manos previamente.

Si realizamos alguna actividad física o deporte es recomendable que limpiemos la zona al concluir, ya que el sudor desprende un salitre ácido que irrita la herida.

Los baños de inmersión de cualquier tipo, tanto en bañera, piscina, río o mar; no son recomendables en absoluto ya que la subexposición al agua puede ablandar la costra-cascarita, más de lo adecuado.

Es importante mantener la herida lejos del polvo y no exponerla a ambientes en que la suciedad abunde.

HUMECTACIÓN (Hidratación):

Otra parte importante del proceso de cicatrización es la que atañe a su correcta humectación y es aquí donde surgen las mayores divergencias.
El hecho que el tatuaje deba mantenerse hidratado se debe a que, de esta forma, evitamos que la costra se endurezca arrastrando partículas de tinta que deberían permanecer bajo algunas capas de piel, durante su desprendimiento. Esto puede producir desagradables huecos de color en el dibujo. Por lo tanto es fundamental a la hora de obtener un resultado óptimo.

Hasta hace unos años los tatuadores solíamos recomendar el uso de vaselina sólida para mantener la zona hidratada lo cual, algunos artistas sostienen hoy día, es "el mejor método". Personalmente considero que la vaselina, por su densidad, obstruye demasiado los poros ya que forma una película casi-plástica, sobre la piel.

No debemos olvidar que este producto se extrae como derivado del petróleo y que su uso frecuente sobre la dermis ha traído, en más de una ocasión, reacciones alérgicas tales como salpullido, enrojecimiento y comezón (aunque estas sintomatologías se quitan al cabo de unos días de abandonar el producto).

Otro posible agente hidratante esta constituido por las tan habituales cremas para la piel. Siempre y cuando éstas sean de PH neutro o no posean ningún tipo de perfumes o alcoholes. Entre ellas podríamos destacar la Nivea que siempre ha dado un muy buen resultado.

De este punto podemos desprender una variante que se está usando mucho hoy día en los estudios de tatuaje a la hora de recomendar "un método de cicatrización"; que es el la utilización de pomadas o cremas que posean algún tipo de antibiótico.
De esta manera el organismo recibe una ayuda para efectivizar y acelerar el curado de la herida. Tenemos que considerar que el uso de estas pomadas presenta algunos riesgos como ser alergias o sobre-supuración.

En caso de producirse una alergia es posible que se deba a que alguno de los componentes de la pomada no es bien aceptado por nuestro cuerpo. En ese caso es recomendable abandonar esta pomada y recurrir a otra más inocuas como son las antes citadas cremas humectantes.

En todos los casos el ungüento se debe aplicar cada vez que se lave la herida o en todas las ocasiones en que se perciba la piel demasiado seca, tirante o con picores. Estos últimos son normales de la cicatrización salvo, como antes hemos visto, cuando la zona este enrojecida o amarillenta.

La sobre-exposición a la pomada puede devenir en una supuración anormal de la piel, ablandamiento de la costra-cascarita con la consiguiente perdida del tinte.

ACLARACIONES:

La pomada que elijas, sea cual fuere y dependiendo de las indicaciones del profesional, debe ser aplicada a partir del primer lavado del tatuaje y hasta que se desprenda toda la costra-cascarita.

Una vez caída toda la costra-cascarita es recomendable continuar humectando la piel hasta un mes o más después de haber sido realizado el tatuaje. De esta forma la piel recobrará su suavidad y tersura además de que los colores lograrán asentarse con mayor facilidad. Para tal efecto se puede utilizar cualquier tipo de pomada humectante-hidratante.

Nunca se debe aplicar el ungüento de forma excesiva sino más bien, en pequeñas dosis bien distribuidas por toda la zona a base de masajes suaves.

Es fundamental higienizar las manos antes de aplicar el ungüento. Y "nunca" rascarte la zona mientras se está curando a pesar de que tengas mucha comezón ya que podrías arrancar partes de la costra-cascarita con el riesgo de que quede algún agujero en el dibujo. Preferible aplicar una fina capa de crema para disminuir la molestia.

Por lo tanto, y bajo ningún aspecto, se debe exponer el tatuaje al sol a lo menos hasta el primer mes a partir de su realización. Para poder concurrir a una playa o piscina sin preocuparte por él, basta con aplicar sobre la superficie del dibujo una buena capa de protector solar de alto grado siempre y cuando la costra ya se haya quitado. En caso contrario no se debe exponer el tattoo al sol.

Es recomendable protegerlo de los rayos solares durante toda la vida con un buen protector ya que de este modo su calidad se mantiene durante mucho más tiempo.

Recuerda que las recomendaciones del tatuador están basadas en sus experiencias personales luego de años de trabajo. No hagas caso de las opiniones de amigos, familiares o personas ajenas al tema. Puede que no tengan los mismos conocimientos.

Ante cualquier anomalía debes consultar al tatuador que realizó la obra o al personal del estudio. En caso de que no estés conforme con sus directrices no dudes en preguntar a otro "profesional".

MÉTODO DE VENDADO:

Recientemente se ha impuesto un método de cicatrización basado en el vendado del tatuaje para protegerlo de agentes infecciosos. A quienes recomiendan la utilización de gasas o vendas de papel. En ambos casos se desprenden partículas (fibras de hilo y celulosa) que se pegan a la costra provocando infecciones. También hay que tener en cuenta que estos materiales terminan adhiriéndose a la herida haciendo más difícil cambiar el vendaje además de que se puede arrastrar consigo trozos de costra.

Por todos estos motivos se empezó a utilizar el FILM ADHERENTE a la hora de vendar la herida. Sus ventajas radican en que:

1.- Al ser un plástico impermeable, no se filtra el polvo ni ningún otro tipo de agente infeccioso.

2.- No desprende ningún tipo de sustancia ni se pega a la herida.

3.- Mantiene la piel humectada por un periodo de tiempo mayor ya que no deja que se filtre el aire y, por lo tanto, no se seca la herida.

4.- Al no secarse la herida, no se produce mas costra que una leve capa de piel la cual no logra arrastrar el pigmento hacia la superficie por lo que el resultado suele ser óptimo.

5.- El proceso de cicatrización suele durar de entre cuatro a seis días en oposición al resto de los tratamientos que habitualmente tardan de entre siete y quince. No tiene más contraindicaciones que el calor que da a la herida, el cual suele ser mayor de lo normal. Esto acarrea, en algunos casos, irritaciones de la piel y hasta sarpullidos pero sólo suelen verse en verano o en algunas personas que trabajan en cocinas, calderas o en sitios de altas temperaturas.

Por lo demás y bajo mi punto de vista, este ha sido el método más efectivo y rápido que encontré para cuidar el tatuaje.

UTILIZACIÓN:

Una vez terminada la sesión de tattoo se venda el tatuaje aplicando previamente una fina capa de vaselina o pomada antibiótica. Es necesario sellar la venda con algún tipo de cinta adhesiva para que no se filtre el aire ni se corra el vendaje.

Transcurridas unas dos o tres horas se remueve el vendaje, se lava la herida y se aplica otra fina capa de ungüento con un suave masaje. Luego se vuelve a vendar con plástico y se repite el proceso cada seis u ocho horas durante tres o cuatro días; dependiendo de las indicaciones del tatuador.

En cuanto se deja usar la venda es preciso continuar lavando y humectando la zona con el método tradicional que indique el artista hasta que se desprenda una fina capa de piel.

CONCLUSIÓN:

Elijas el método que elijas o sea cual sea la recomendación del profesional, ten en cuenta que los cuidados del tatuaje son fundamentales para conseguir un buen resultado.

No todo acaba cuando el tatuador apaga la máquina, miras en un espejo cómo ha quedado el dibujo en tu piel y te pone el vendaje. El proceso del tatuaje continúa en casa con un cuidado responsable y hasta más allá de su completa cicatrización. Esto afecta la calidad visual del mismo en el presente y en el futuro.